¡Bienvenido al nuevo episodio de Ayuners! Una nueva edición con más contenido de calidad para ti sobre estilos de vida saludable. En esta ocasión hablaremos sobre una de las partes más fundamentales de una correcta alimentación. Se trata del proceso de digestión, aquel en el cual descomponemos tanto mecánica como químicamente los alimentos para obtener todos sus nutrientes.
¿Pero solo por eso es importante? Considerando que existen alimentos que no necesitan ser modificados o alterados para ser absorbidos correctamente, no diremos entonces que es la disfunción más relevante. Aún así, existen muchas otra como la desmineralización, las infecciones intestinales o la disminución de vitamina B12, que pueden tener un grave impacto en la salud en general.
¿Qué ocurre en el cuerpo para que la digestión se vea afectada? El proceso de digestión consta de dos partes, un proceso mecánico que inicia en la boca con la masticación y culmina en el recto con la defecación, y un proceso químico del que se encargan todos los jugos gástricos y enzimas pancreáticas. De todos ellos, hay un punto esencial del que deseamos hablar: la hipoclorhidria.

¿Qué es el ácido clorhídrico?
También se le puede conocer como ácido muriático, y no es más que el principal componente de los jugos gástricos. Este ácido está compuesto por cloruro de hidrógeno el cual permite el ambiente ácido con un pH que se mantiene por norma en 3,5. El ácido clorhídrico se produce en las células parietales de la mucosa gástrica estimulado principalmente por las hormonas gastrina.
A la deficiencia de ácido clorhídrico se le conoce como hipoclorhidria y es una de las principales causas de mala digestión y problemas gastrointestinales de distintas índoles. A continuación te contaremos sobre 7 causas de hipoclorhidria que quizás no conocías.

7 causas de malas digestiones, por las cuales, quizás tengas hipoclorhidria
Para empezar hay que aclarar que cualquier situación o elemento capaz de modificar el pH del estómago va a incidir directamente sobre el proceso de digestión y este a su vez en diversos procesos metabólicos que sostienen la salud del organismo, algunos que podemos resaltar son:
- El estrés: Exponer al cuerpo a situaciones de estrés siempre resulta en enfermedad, ¿pero qué es lo que sucede en el estómago? La actividad digestiva es dirigida por el sistema nervioso parasimpático a través del nervio vago, y cuando el nervio vago es sometido a estrés, su funcionamiento y estimulación es más precaria. Esto conlleva a que algunas tareas como la producción de ácido clorhídrico disminuye y como consecuencia la capacidad de absorción.
- Disminución de proteína en la dieta: Las proteínas son alimentos completos que ameritan de un ambiente ácido para ser correctamente digeridos y asimilados. Por ello, ellas misma inducen la producción de pepsinógeno y pepsina, otros elementos que constituyen los jugos gástricos, y además estimula a la gastrina para que envíe señales de producción de ácido clorhídrico.
Por ende, si disminuimos las porciones de proteínas de nuestra dieta impedimos la producción de ácido y la regeneración de la mucosa.
- El uso de antiácidos: Limitan el uso de ácido clorhídrico, generalmente en casos de enfermedad, pero el uso indiscriminado puede acarrear malas digestiones, disminución de la regeneración mucosa e incluso desmineralización como método compensatorio para lidiar con el ambiente excesivo de ácido acumulado y no utilizado.
Aún nos quedan dos causas importantes por mencionar y que seguramente desconoces. Así que no dejes de escuchar el nuevo episodio de Ayuners completo para reconocer las principales causas de hipoclorhidria y mala digestión. ¡Dale play!