Se ha comprobado a través de varios estudios el efecto del ayuno intermitente sobre las enfermedades propias del envejecimiento. Efecto que no solo retrasa su aparición, sino que es capaz de “rejuvenecer” los tejidos por medio de todos los mecanismos compensadores de la cetosis como lo es la autofagia.
Hay un estudio en especial, donde se comprobó los beneficios del ayuno al suprimir los efectos de los antioxidantes de la dieta. Hablamos de la carga de vitamina C y vitamina E de los alimentos, y cómo esto ayudó a expresar genes capaces de incidir sobre el envejecimiento y sus enfermedades. ¡Veamos de qué se trata!

¿Cómo el ayuno detiene el envejecimiento?
Sabemos que el ayudo incita un cambio metabólico global, para ello, modifica distintos procedimientos cómo la generación de energía, la asimilación de la misma, los marcadores biológicos y la selección natural de tejido más óptimo. Todos estos efectos conllevan a que el estrés oxidativo que afecta a las células y sus funcionamientos se reduzca.
¿Cuándo inicia? Luego de pasar 12 horas de ayuno nuestro cuerpo empieza a enviar señales de que requiere más combustible. Así poco a poco va reduciendo los depósitos de glucosa en sus distintas presentaciones, hasta que llegado un punto el organismo actúa sobre otro tipo de reservas: las grasas. El tejido adiposo también es una fuente natural de energía, y en ausencia de energía se activa una flexibilidad metabólica que permite utilizarlo como combustible.
Es entonces, cuando se inicia la cetosis nutricional, se queman las grasas y se forman cuerpos cetónicos para alimentar al cerebro. Pero al mismo tiempo se activa la autofagia, este proceso lisosomal lo que hace es preservar la supervivencia de las células más fuertes, a expensas de todo el material celular dañado, enfermo o anormal.
Durante todo esto ocurre un proceso de depuración y desintoxicación, las células van retomando más vitalidad y su funcionamiento se vuelve más eficiente. Más eficiente para absorber nutrientes, para sensibilizarse a hormonas y para formar moléculas. De este modo es que se detiene el envejecimiento.
¿El ayuno promueve la expresión de genes que detienen el envejecimiento?

Sí, cuando entramos en ayuno se expresan algunos tipos de oxígeno que promueven la mayor formación de sirtuinas (sirt3). Estas enzimas son famosas por detener el envejecimiento y prevenir la aparición de obesidad, diabetes, hipertensión y otras enfermedades cardiovasculares propias de la vejez. Como tal las sirtuinas son enzimas antivejez.
Esta teoría es fundamentada en un ensayo randomizado que se realizó en dos grupos de adultos sanos. Se crearon dos grupos y cada uno fue sometido durante 3 semanas a un plan de ayuno intermitente con suplemento de antioxidantes y un plan de ayuno intermitente sin suplementos de antioxidantes.
Los resultados que se pudieron observar fueron los siguientes:
- Ambos grupos toleraron bien el patrón de alimentación.
- Se evidenciaron niveles más elevados de sirt 3 en el grupo que practicó el ayuno sin antioxidantes. Lo que comprueba que estos suplementos pueden ser capaces de suprimir su máxima producción.
- Disminuyó el nivel de insulina en plasma en el grupo que practicó ayuno intermitente sin suplementos.
Luego de obtener estos resultados, los autores plantean seguir modelos de ayunos en días alternos. Donde un día consuman solo el 25% de los requerimientos basales y los días de alimentación a demanda consuman el 175% de los requerimientos basales, esto aseguraría una mejor expresión de genes contra el envejecimiento y reduciría el estrés oxidativo, además claro de mejorar los indicaciones fisiológicos como presión arterial, colesterol, glucemia, insulina y más.
Conclusión
Muchos estudios incitan a la población a practicar planes de ayuno. Los estudios realizados hasta ahora, comprueban que con un proceso tan simple, sencillo y seguro, se pueden obtener grandes beneficios. Y recuerda, todo lo que mejora por dentro, indudablemente también lo hace por fuera, detén el envejecimiento y ayunízate.