La pregunta principal de todo deportista o de alguien que comenzará los buenos hábitos y una vida de ejercicios es ¿Es bueno entrenar en ayunas? ¡aquí te lo respondemos!
El entrenamiento en ayunas es una práctica muy popular y recomendada por los profesionales de la vida fitness ¿pero sabes a que se debe esto? Bien, básicamente el organismo tiene la reservas energéticas necesarias para llevar a cabo ejercicios de alta intensidad sin necesidad de ingerir alimentos. Además, el periodo de ayuno permite concentrar toda la energía únicamente en tus músculos.
Al ser así, el estar en ayuna mejora considerablemente tu rendimiento durante tu rutina diaria de ejercicio. Además, potencia los resultados y despierta todas las actividades metabólicas del cuerpo.
¿Es bueno entrenar en ayunas? – Beneficios
Existen 3 razones saludables para promover el entrenamiento en ayunas, y todas ellas van dirigidas al impacto del ayuno en el proceso de obtención y utilización de energía.
Es bueno entrenar en ayunas porque disminuye los niveles de grasa
Resulta que ¡Sí! es bueno entrenar en ayunas sobre todo para bajar de peso.
Cuando tu cuerpo está en ayuno no está recibiendo suministros externos de energía. Sin embargo, se ha demostrado que no los necesita. Todos los organismos tienen la capacidad de obtener energía a partir del tejido adiposo que tanto molesta o del que tanto deseas deshacerte, pudiendo prescindir entonces de la ingesta de carbohidratos.
Esto es posible porque el cuerpo quema la grasa para volverla energía cuando las reservas de glucosa han disminuido en la circulación sanguínea. Esta acción se conoce como flexibilidad metabólica, donde el organismo moviliza las grasas, las destruye e implementa en todos los procesos energéticos.

Para equilibrar los estados de inflamación y desinflamación de tu organismo
Las células tienen todo una maquinaria para cumplir con sus funciones vitales. Estas muchas veces se ven saturadas por el exceso de trabajo. El ayuno permite que las células se desinflamen asimilando mejor los nutrientes, el oxígeno y la obtención de energía por parte del cuerpo.
Del mismo modo, el ayuno durante la actividad física, activa un conjunto de proteínas de las que se puede mencionar la AMPK. Esta, es un detector de energía que permite que la célula regule mejor la captación de calorías para su transformación en energía.
Para realizar un descanso del sistema digestivo
Como se explicó anteriormente, el ayuno durante el ejercicio permite concentrar toda la energía en la actividad de los músculos, ¿por qué es esto relevante? Bueno, si desayunas, o ingieres algún alimento poco antes de iniciar, parte de tu porcentaje de energía irá dirigido a metabolizar esas calorías.
Tu cuerpo concentraría un gran nivel de energía en digerir y distribuir los nutrientes de esos alimentos por todo tu cuerpo, en lugar de focalizarse en tu rendimiento físico para completar tus rutinas. Lo que se traduce en que te esforzarías más y posiblemente terminarías más cansado.
¿Qué puedo usar para sustituir los alimentos?
No es necesario que te prives de los alimentos, simplemente los vas a ingerir después de tu entrenamiento. Antes de empezar sin embargo, existen algunas cosas que si puedes permitirte para mantenerte hidratado, por ejemplo:
- Infusiones de esencias.
- Agua con limón.
- Café.
- Café con aceite vegetal (coco es una estupenda opción).
- Zumos sin azúcar.
Seguramente alguna vez escuchaste del cardio en ayunas y no estabas convencido de que fuese una opción segura o saludable, pero ahora has descubierto que en efecto lo es y que además te permite alcanzar tus objetivos mucho más rápido que la forma tradicional. Y la respuesta final es un rotundo ¡Sí! no solo es bueno entrenar en ayunas, sino que es esencial a la hora de querer resultados efectivos y más rápidos.