¡Pequeña pero potente! Esta es una expresión que puedes usar para referirte a la tiroides, una glándula localizada en tu cuello y que ayuda a tu cuerpo a funcionar de forma correcta. Esta glándula es el acelerador o el freno de tu organismo, por lo que te explicaremos sobre la función de la tiroides y cómo mejorarla.
Esta glándula situada en la parte baja de tu cuello y con forma de mariposa es la encargada de regular el metabolismo de tu organismo, por lo que interviene en la regulación de la temperatura y en el funcionamiento adecuado del corazón, cerebro, músculos y otros órganos.
¿Cómo funciona la tiroides?
El funcionamiento de la tiroides inicia en tu sistema nervioso central. El hipotálamo libera una hormona conocida como TRH. Esta hormona llega a la hipófisis a través de la circulación sanguínea y estimula la producción de la TSH (hormona estimulante de tiroides).
Cuando se libera la TSH y llega a la tiroides, esta glándula secreta dos hormonas conocidas como T4 (tiroxina) y T3 (triyodotironina), las cuales son controladas por la TSH. Cuando los niveles de T4 y T3 en la sangre disminuyen, es la TSH quien se encarga de estimular a la tiroides para que secrete más.
Lo mismo sucede cuando ya hay suficiente concentración de T4 y T3, el sistema nervioso central inhibe la TSH para detener la producción de ambas.
Conoce sobre el hipotiroidismo y el hipertiroidismo
La tiroides puede sufrir 2 alteraciones que influyen enormemente en tu calidad de vida. Puede suceder que la tiroides esté trabajando demasiado (hipertiroidismo) o que tu glándula esté poco activada (hipotiroidismo).
Tanto el hipertiroidismo como el hipotiroidismo, tienen efectos sobre el sistema reproductor, sistema cardiovascular y los principales órganos del cuerpo. Aunque es más común que las personas –mujeres sobre todo– sufran de hipotiroidismo. También existen maneras de cómo mejorar la función de la tiroides, luego de detectar que tipo de alteraciones de sufren.
¿Cómo saber si sufres de hipertiroidismo o hipotiroidismo?

Principalmente empiezas a sospechar por los signos y síntomas que se presentan. Puede que te sientas cansada/o, con fatiga, te cuesta levantarte por la mañana, sufres de estreñimiento o se te cae el cabello. Otros de los síntomas que se pueden presentar en el hipotiroidismo son:
- Aumento de peso y escaso apetito.
- Alteraciones en la menstruación.
- Frecuencia cardíaca baja.
- Hormigueo.
- Déficit auditivo.
- Haces ejercicio y tu piel se pone roja pero no transpiras.
- Te cuesta concentrarte u olvidas las cosas.
- Sensación de frío.
- Te duelen las articulaciones.
- Pérdida del apetito sexual.
Igualmente, puede que te sientas pesada o tus tobillos se hinchan y que retienes líquidos, todas estas son señales de que puede haber problemas con tu tiroides.
Con respecto al hipertiroidismo, los síntomas están mayormente enfocados en el nerviosismo, taquicardia, temblor en las manos, aumento de sudoración, problemas del sueño, pérdida de peso, deposiciones constantes, poca tolerancia al calor y aumento del apetito.
Es probable que pienses que es algo normal porque el médico ha dicho que se controla poco a poco, pero sigues con el malestar y tal vez es causa del estrés que tu cabello se caiga e incluso tienes familiares que también sufren de estos síntomas. De igual manera existen varias maneras de cómo mejorar la función de la tiroides.
Sin embargo, hay ciertas formas de que investigues o te asegures de si hay algún problema con tu tiroides. ¿Qué pasa cuando acudes al médico y en el examen basal de la tiroides todo está bien?
¡No te conformes!
Si realmente quieres mejorar el funcionamiento de tu glándula tiroidea, debes tener en cuenta que necesitas la ayuda de verdaderos profesionales de la salud ¡Entra ahora al club ayuners! Y cambia tu estilo de vida.
Hay otros valores que pueden estar afectando la función de tu tiroides, así que es importante que conozcas que tienes que valorar otros aspectos como la T4 libre, T3 libre, los niveles de cortisol, hierro, prolactina, serología vírica y el T3 reversa.
Estos estudios no siempre forman parte del perfil común al examinar la función de la tiroides y ahora te explicaremos por qué necesitas tomarlos en cuenta.
La T4 es la hormona principal que secreta la tiroides, a partir de ella, es que se forman las hormonas T3 que son las que realizan la función en el metabolismo. Ambas (T4 y T3) se encuentran en tu organismo unidas a una proteína o en forma libre, siendo esta última cuando están activas y tienen acción sobre tu organismo.
El estudio T3 reversa te indicará si hay deficiencia de hormonas en tu organismo. Si obtienes niveles de T3 reversa muy altos, significa que hay pocas hormonas tiroideas libres y es una señal de que puede ser la causa del hipotiroidismo.
Los niveles de cortisol y prolactina son otros valores que pueden indicar una posible alteración en la función de la tiroides.
Estas hormonas del estrés tienden a estar altas cuando la tiroxina (T4) no funciona bien porque el cuerpo intenta compensar el déficit. Otra posibilidad es cuando el cortisol está bajo debido a la fatiga adrenal.
¿Cómo mejorar la función de la tiroides?
Los tratamientos entre el hipotiroidismo y el hipertiroidismo –así como sus síntomas– son distintos, por lo que dependerá de cuál es la alteración que tiene tu tiroides.

Hipotiroidismo
Si te identificas con lo que has leído previamente, tu alimentación es muy importante para lidiar con estas alteraciones. Principalmente hay 3 grupos de alimentos que afectan a quienes padecen de hipotiroidismo: lácteos, trigo y soja.
Estos alimentos y sus derivados interfieren en la función de la tiroides, por lo que debes evitar:
- Lácteos: leche, fermentos lácticos como yogurt o los quesos.
- Trigo: todo lo que contiene gluten, como el pan, harina, bollería.
- Soja: leche de soja, tofu y demás alimentos que contengan soja.
4 minerales que regulan la tiroides en hipotiroidismo
El selenio, magnesio, yodo y el hierro, son realmente importantes al momento de querer mejorar la función de la tiroides. Las hormonas tiroides se forman con yodo, por lo que será fundamental para la salud tiroidea.
Mientras que el hierro puede ayudarte a sobrellevar la anemia que se presenta entre los síntomas del hipotiroidismo, el selenio aumenta la formación de T3 libres. En cambio, el magnesio te ayuda a mejorar la fatiga y la calidad del tejido muscular.
Todos los alimentos que contengan estos minerales son indispensables en tu dieta para regular la tiroides y a continuación te vamos a mencionar algunos de ellos:
- Selenio: nueces de Brasil, huevos, caviar, mejillones, atún u otros alimentos del mar.
- Yodo: huevos y todo lo que provenga del mundo marino porque es una fuente de yodo, como las algas, almejas y mariscos.
- Magnesio: brócoli, cacao puro, alcachofa, plátano, aguacate, sésamo o frutos silvestres rojos como la frambuesa, arándanos y fresas. En general los vegetales están llenos de magnesio de buena calidad.
- Hierro: carne, legumbres, espinacas, sésamo, entre otros.
Hipertiroidismo
El tratamiento depende de la medicación que te indique tu médico para controlar este exceso de tiroides y el grado de la enfermedad, edad y tus preferencias. No obstante, en general lo que debes evitar si tienes hipertiroidismo son los alimentos que contienen yodo, como los que provienen del mar.
Recuerda que el yodo es la materia prima para fabricar hormonas tiroideas y en este caso no necesitas más producción. Asimismo, si ya ingieres medicamentos para la tiroides necesitas evitar consumir suplementos de hierro o de algas porque pueden disminuir el efecto del tratamiento.
Tener una buena función en la tiroides puede cambiar en gran medida tu calidad de vida, así que realiza los estudios necesarios para determinar si lo que te sucede tiene que ver con estas alteraciones.