La soja es un alimento nutritivo y versátil cuyo consumo ha aumentado en los últimos años. Esto, quizá porque la comunidad vegetariana a nivel mundial está creciendo o quizá porque ha sido recibida por todos los paladares de buena manera. No obstante, existe controversia con respecto a su consumo. Por ello, voy a explicarte cuales son los beneficios, propiedades y riesgos de la soja a continuación.
Los platillos que se pueden preparar con soja son deliciosos. Por fortuna, hay muchos derivados como el tofu, la leche de soja o la lecitina que suelen ser utilizadas para preparar una enorme cantidad de comidas. Pero además, la soja también cuenta con un gran número de propiedades que la hace muy saludable.
¿Qué es la soja?
La soja es una planta que pertenece a la familia de las leguminosas. Es cosechada principalmente en Asia, pero su gran popularidad la ha llevado a comercializarse en otros continentes como América, donde argentina despunta como su mayor productor.
Entre las propiedades de la soja, se encuentran sus altos porcentajes en vitaminas del grupo B, minerales como el magnesio, el fósforo y el hierro. Además, de su aporte de aminoácidos y proteína. Es por ello, que es un sustituto de esta última para todos los vegetarianos y veganos.
Esta planta ha sido estudiada minuciosamente porque parece aportar beneficios y proporcionar riesgos a partes iguales. Siendo necesario muchos más estudios para afianzar alguna de las teorías tanto a favor como en contra. No obstante, recopilamos para ti los beneficios más reconocidos de la soja y las impresiones negativas más alarmantes.
Los alimentos con soja, son de mucha ayuda para personas que se encuentran comiendo saludable. Sin embargo, comer en exceso estos alimentos, acarrea consecuencias. Es por eso que te invitamos a que te unas al club ayuner y aprendas más sobre la buena alimentación. ¡Ingresa ahora!

Beneficios de la soja para la salud
La soja presenta muchos beneficios, entre ellos destacan:
Aporte nutricional:
Uno de los beneficios más sorprendente de la soja es lo nutritiva que es, ya que la planta cuenta con un alto porcentaje en vitaminas, minerales y proteínas.
Específicamente, la soja es rica en vitaminas como la vitamina E, tiamina, riboflavina y piridoxina, todas del complejo B. Además, aporta minerales esenciales como hierro, magnesio, manganeso, fósforo, calcio, potasio y finalmente aceites esenciales como omega 6 y 9.
Versatilidad para su preparación:
La soja es muy fácil de preparar y existen muchas maneras de recrear un platillo delicioso a base de soja, esa virtud es uno de sus grandes beneficios, incluso, muchos restaurantes han realizado menús donde elaboran hamburguesas de soja, pizzas, entre otras opciones.
Cardioprotección:
Gracias a sus componentes la soja es un alimento que protege al corazón. Las grasas que aporta son totalmente saludables y es una excelente alternativa para sustituir las grasas saturadas de las carnes rojas. La soja ha demostrado reducir la presión arterial y por ende la incidencia de enfermedades cardíacas y eventos cerebrovasculares.
Reduce el impacto de la menopausia:
La soja cuenta con isoflavonas un tipo de estrógeno natural que de acuerdo a algunos estudios ha demostrado reducir los efectos más severos de la menopausia en las mujeres, como los bochornos o el cambio de humor. No obstante, no hay ningún estudio confirmatorio.
Regulación de la diabetes:
La soja es un alimento recomendado en diabéticos porque mantiene los niveles glucídicos en rangos saludables. Esto se debe a que su índice glucémico es bajo.
Prevención del cáncer:
Una teoría un poco aclamada pero muy controversial. Estudios afirman que la soja tiene un alto porcentaje de antioxidantes que ayudan a prevenir el cáncer de mama y el cáncer de próstata.

Riesgos del consumo de soja
A pesar de ser un alimento natural, de origen vegetal y con un alto porcentaje de propiedades beneficiosas para la salud. También existen estudios que condicionan su consumo de forma prolongada, por lo general las teorías de apoyan en los siguientes puntos:
Disruptores endocrinos:
Estas moléculas son producidas por la soja, no aportan ningún valor nutricional y parece que al ser consumida en alto contenido pueden actuar como hormonas y alterar el metabolismo. De hecho, son más sensibles en órganos cuya producción hormonal es mayor como la mama o el páncreas, contradiciendo así la teoría de que la soja ayuda a prevenir el cáncer.
Alergia:
Hay muchas personas que son alérgicas a los componentes de la soja, y ellos pueden llegar a desarrollar alergias o intolerancias a sus derivados, como la leche. Una de las manifestaciones clásicas de la alergia a la soja es la urticaria.
Hipotiroidismo:
Parece que el consumo de soja puede llegar a disminuir el efecto de los medicamentos utilizados en esta condición.
Cambios en la carga hormonal:
La misma composición de isoflavonas induce en algunas personas, especialmente mujeres, algunos cambios hormonales que pueden llegar a ser perjudiciales para la salud.
En perspectiva es cuestión de poner los riesgos y los beneficios en una balanza, la comunidad vegana y vegetariana se apoya mucho en ella para complementar su aporte nutricional. Pero también está claro que muchos de los estudios que han sido realizados a favor de la soja y sus propiedades, ha sido financiada por industrias que la comercializan. Así que queda a criterio personal la utilización de este alimento.