Es súper frecuente escuchar a personas que sufren de hipotiroidismo quejarse sobre la dificultad que poseen para adelgazar ¡Y aún peor, la facilidad con la que aumentan! Si tu queja es «Tengo hipotiroidismo y no puedo adelgazar» quédate y sigue leyendo a continuación.

Sin duda esta es una condición compleja, estamos hablando prácticamente del funcionamiento deficiente del metabolismo de nuestras células. Lo que lleva al organismo a presentar este enlentecimiento para perder calorías.
No obstante, hay bastante que escudriñar del asunto. Te invito a que me acompañes a conocer qué ocurre exactamente en el cuerpo con hipotiroidismo y por qué es tan difícil adelgazar.
Tengo hipotiroidismo y no puedo adelgazar: ¿Que debo saber?
Bueno para comenzar debemos hablar un poco sobre la glándula tiroides. Esta pequeña glándula se ubica en el centro del cuello y tiene forma de mariposa. Su función va desde regular el nivel de energía de las células hasta la temperatura. Por lo que podemos deducir que su rol es fundamental para el equilibrio metabólico.
Para hacer todas estas funciones, la tiroides segrega una hormona llamada T4. La cual es una hormona inactiva, que necesita de una enzima para transformarse a una hormona activa que recibe el nombre de T3 y así poder actuar.
Una vez esta transformación tiene lugar, la hormona T3 pasa al interior de las células. Se encarga de regular el nivel de energía que estas generan en el interior de las mitocondrias.
Cuando hay hipotiroidismo alguna fase de este ciclo se encuentra alterada, ya sea que hay una deficiente producción de T4, que hay deficiencia de la enzima transformadora o que hay una pobre transformación de T3. Con lo cual las células no poseen la suficiente energía para realizar sus actividades.
Tengo hipotiroidismo y no puedo adelgazar: ¿Cómo repercute esto en el organismo?
De muchas maneras, típicamente tenemos los síntomas más frecuentes de los pacientes hipotiroideos que son obesidad y cansancio. Pero también presentan alopecia, ansiedad, diaforesis o sudoración excesiva, baja temperatura, bradicardia, estreñimiento, entre otras afecciones.
Pero ¿a qué se deben estos síntomas? Bueno, la deficiente función tiroidea da como consecuencia un metabolismo basal bajo. Ya que las células no cuentan ni con el suficiente oxigeno ni con la suficiente energía para desarrollar sus actividades, entonces el metabolismo se enlentece.
¿Y qué pasa cuando el metabolismo está lento?
Es difícil adelgazar porque la poca energía que hay se concentra en funciones vitales. Asimismo se instalan mecanismos compensadores para reducir la exigencia basal. Que también consumen esta energía relegando funciones como la quema de grasa o el control de la temperatura a segundo plano.
Y ya que nos estamos centrando específicamente en la pérdida y ganancia de peso porque ambas situaciones son alteradas por la hipoactividad de la tiroides. Tenemos que explicar mejor como suceden cada una, y por qué aún utilizando hormonas tiroides sintéticas no logramos revertir ese efecto.
Bien, en cuanto a la ganancia, podemos decir que el metabolismo lento que se tiene bajo el hipotiroidismo influye en la asimilación y utilización de los nutrientes. Como hay falta de energía es de suponer que no todos se utilizan y por ello una gran porción se acumula en forma de grasa.
Así es, lo que el cuerpo no usa para convertirlo en energía lo almacena en tejido adiposo, y esto, consecuentemente, aumenta el peso. También existe en el hipotiroidismo cierto descontrol en el metabolismo del yodo por lo que el agua y el sodio se acumulan, retienen liquido. Y esto también supone un aumento de peso aunque de manera más nimia.
Dislipidemias por aumento de peso
Por supuesto como es de esperar, el sobrepeso obtenido gracias al hipotiroidismo puede generar dislipidemias. Y crear todo un circulo vicioso donde el cuerpo esté atacado por distintos flancos.
El paciente puede desarrollar hipertrofia cardíaca, puede desarrollar una aumento de tamaño excesivo de la tiroides por intentar compensar las necesidades orgánicas de sus hormonas. Que es característico de la enfermedad y se conoce como bocio.
También puede generar infertilidad, hay que recordar que las hormonas sexuales tienen un origen lipídico. En fin, todo el cuerpo se altera con el establecimiento del hipotiroidismo.
En vista de esto, muchos pacientes acuden a sus médicos y les son recetados hormonas tiroides sintéticas para compensar la pérdida. Por eso siempre escuchamos a las personas hablar sobre el consumo de levotiroxina y de que aún así no logran reducir su peso.
¿Hay estudios que lo avalan?
Sí, hay estudios que avalan que las dosis altas de esta medicina pueden ayudar a revertir el peso. Pero, cuando se suspenden hay un efecto rebote que lleva a la recuperación casi inmediata de los kilitos extras. Así que la solución ideal viene siendo una dieta ajustada a las necesidades del metabolismo.
Como sabemos en el hipotiroidismo hay una alteración del metabolismo del yodo. Aparte de la dificultad para adelgazar, también hay un metabolismo más lento. Esto conduce a que la dieta que consuma una persona que tiene una tiroides hipoactiva no puede ser igual que la de una persona con tiroides sana.
Lo principal que debes saber es que NO debes practicar dietas que puedan alterar aún más el funcionamiento de tu tiroides. Es de suma importancia que tengas un gran control en todo lo que ingieras.
¿Que debo comer?
Los expertos recomiendan dietas ricas en yodo. Ya que este elemento compensa mucho la formación de hormonas tiroideas. Por eso es bueno que consumas mariscos, pescados, algas, judías o cualquier otro tipo de legumbre.
Otra cosa que no debe faltar en tu dieta es la fibra. Las personas hipotiroideas sufren muy a menudo de estreñimiento por la hipomotilidad intestinal. Asegúrate de contar con 2 cucharadas de fibra diaria y abundante agua para evitar esa situación. Asimismo añade alimentos ricos en vitaminas y minerales, nutritivos y saludables.

Frutas, verduras, hortalizas, frutos secos y cualquier otro componente de origen vegetal es ideal para una dieta saludable. Hay estudios que exponen que una dieta vegana es muy efectiva para el control del hipotiroidismo. Al parecer los veganos son personas cuyo riesgo de sufrir esta condición es mucho más bajo que en otras personas.
La verdadera solución para adelgazar en el hipotiroidismo es la combinación de sus hormonas sintéticas con una correcta alimentación. En este punto el cuerpo estaría compensando y las funciones se desarrollarían mejor. Incluso se podría acelerar un poco más el metabolismo y compensarlo con otros hábitos saludables como el ejercicio.