Muchos son los mitos que se han creado del ayuno intermitente y la masa muscular, la mayoría sin embargo, no tienen lógica ni fundamento científico. Por ejemplo, la opinión popular de que el ayuno intermitente promueve la pérdida de masa muscular
¿Cómo podría promover dicha perdida?
El cuerpo tiene niveles de consumo energético que dejan en última instancia al músculo por ser un órgano de sostén. Esto quiere decir que es imposible que un ayuno programado afecte el volumen y tono de tus músculos. Conoce aquí todo lo relacionado entre ayuno intermitente y la masa muscular.
Ayuno intermitente y la masa muscular -¿Qué sucede en el cuerpo durante el ayuno?

Es importante que sepas que cuando el cuerpo se encuentra en un periodo de ayuno, muchos procesos descansan de la constante asimilación de nutrientes. Esta acción promueve la desinflamación celular, haciendo que cuando se reanude la ingesta calórica esta pueda ser captada de forma más óptima. Asimismo, las vuelve sensible a muchas sustancias como la insulina o la hormona de crecimiento.
Imagínate que tu cuerpo tenga la capacidad de estar expuesto de mejor manera a la hormona de crecimiento, y que está potencie el recambio celular constantemente.
¿Qué sucedería?
Bueno, ella se encargaría de sintetizar proteína para tus músculos e inducir la desintegración de ácidos grasos. Como ves, la influencia del ayuno intermitente es absolutamente positiva, así que más allá de ser un patrón alimenticio se vuelve un método eficaz para regular el metabolismo.
Entonces ¿induce o no la perdida muscular el ayuno intermitente?
La respuesta es ¡No! por supuesto que no. Cuando tu cuerpo no recibe carbohidratos en un tiempo determinado, se apoya de otras fuentes de almacenamiento energético para cubrir las necesidades del cuerpo, principalmente de la grasa acumulada.
De ahí es donde se obtiene toda la energía durante el ayuno, no del músculo. Esto quiere decir que para que tu musculo pueda ser tocado, necesitas entrar en una fase de catabolismo que solo es el resultado de ayunos sostenidos por hasta 3 meses. Y no, el ayuno intermitente no hace entrar a tu masa muscular en catabolismo.
Esto quiere decir que si tus ayunos son programados, y se reservan a una ventana de tiempo de 12 o 16 horas, tu cuerpo no ameritará de la fibra muscular para obtener energía. Es por esta razón que puedes olvidar por completo toda esa teoría, porque la asociación de ayuno intermitente y masa muscular no resulta en daño o injuria corporal.
Contrario a lo que se piensa, si nos fijamos en la historia, nuestros antepasados presentaban un nivel bajo de grasa corporal y uno tan elevado de musculatura que podemos preguntarnos…
¿lo lograban sin comer?
¡Pues sí! aunque no precisamente sin comer.
Resulta que antes no existía el patrón alimentario de exceso que rige el mundo actual. Nuestro antepasados tenían que cazar, trepar, correr y otras cosas para poder conseguir sus alimentos, lo que significa que se estaban ejercitando en ayunas.
Y más allá de desmentir y comprobar que es una teoría errada, es importante que conozcas la forma en que el ayuno intermitente puede promover el crecimiento de la masa muscular.
¡Sí! el ayuno permite que tus músculos crezcan de tamaño y con ello que se aumente tu fuerza y resistencia, y esto lo hace desde tiempos inmemorables.
¿El ayuno intermitente promueve el crecimiento de masa muscular?
Existe un estudio reciente de Stratton et el cual se encargó de comparar los resultados físicos de 26 hombres que estuvieron entrenando 3 veces por semana durante 4 semanas con una entrenamiento de alta intensidad. La mitad del grupo, es decir, 13 hombres siguieron un plan de ayuno intermitente con una ventana de alimentación de 4 a 8 horas, mientras que los restantes 13 se alimentaron con un patrón típico, es decir 3 a 5 veces por día.
Los resultados de este estudio demostraron que ambos grupos -tanto alimentación normal más ayuno intermitente- presentaron cambios significativos en el aumento de la masa muscular, aumento de la resistencia física y perdida de la grasa corporal, sin que existiera una ventaja de un grupo sobre otro.
De acuerdo a la investigación, los bíceps y vastos laterales de los hombres experimentaron hipertrofia o aumento de la talla sin ningún problema. Esto se debe a que el patrón de alimentación que todos seguían abastecían las mismas calorías necesarias para el cuerpo. La única diferencia era que los del ayuno intermitente lo hacían en menor tiempo, específicamente entre 4 a 8 horas al día.
Siempre que mantengas una ingesta adecuada de proteína que puede ser 1 g, 1.6 g o 1.8 g por kg más un entrenamiento de alta intensidad, la hipertrofia y la pérdida de grasa corporal serán eficientes, independientemente del tiempo en el cual lo consumas. Así que puedes estar tranquilo al confiar el ayuno intermitente tu masa muscular.
Lo que no dijo el estudio
Bien, algo que quizás no se reflejó en ese estudio es el grado de energía que podía estar experimentando un grupo con respecto al otro. El mantener en ayunas el cuerpo durante el entrenamiento permite que toda la energía se concentre en los músculos. Esto permite que aumente la resistencia durante el entrenamiento.
Cosa que no sucede si consumes alimentos antes o durante el ejercicio. Esto, debido a que así tu cuerpo redistribuiría la energía entre la digestión y la resistencia de tus músculos.
Entonces, si tu energía y tu fuerza están más focalizadas en tu entrenamiento, te permitirán ser más eficaz con los resultados, ya que podrás rendir más, trabajar más y sentir menos cansancio. Eso sin duda representa un gran impacto en el crecimiento de tus músculos.
¿Qué hemos entendido hasta ahora?

- El ayuno no hace que tu cuerpo consuma músculo.
- no es dañino para el entrenamiento físico.
- te permite aumentar la masa muscular.
- potencia tu fuerza y resistencia.
- te brinda más energía para tus entrenamientos.
Comprobado todo esto con bases científicas, no dejes que nadie vuelva a engañarte con falsas hipótesis conspirativas sobre el ayuno intermitente y la masa muscular. ¡Empieza a practicarlo ahora! entrena tu cuerpo y tu mente para el cuidado y bienestar de tu salud.